Retomando un poco lo que vimos en la Parte 1, hemos aclarado que el Rapto de la lglesia y la Segunda Venida de Jesucristo son dos (2) eventos diferentes. También vimos que el Rapto de la Iglesia puede ocurrir en cualquier momento, sin una señal previa, no obstante, respecto a la Segunda Venida de Jesucristo es necesario que primero se terminen los siete (7) años del tiempo conocido como la Tribulación, para que pueda suceder.

Al tiempo de la Tribulación, que hemos estudiado en Series pasadas, también se le conoce como “el Día de la Ira de Dios” (1 Tesalonicenses 1:10). Así que con lo que hemos visto hasta ahora, podemos entender que es correcto decir que el Rapto de la Iglesia le da entrada al Día de la Ira de Dios, y que la Segunda Venida de Jesucristo entrará cuando finalice el Día de la Ira de Dios.

PRECEDENTES DEL RAPTO EN EL ANTIGUO TESTAMENTO

Un precedente es una acción o circunstancia anterior que es utilizada como ejemplo para ilustrar o justificar un hecho posterior similar. Basados en este término, nos podemos preguntar: “¿Hay algún precedente en el Antiguo Testamento que nos revele o ilustre el Rapto?”. La respuesta directa es: ¡sí! Incluso en el Antiguo Testamento no sólo tenemos un ejemplo, sino dos (2) ejemplos: Enoc y Elías.

REFERENCIAS BÍBLICAS DE LOS RAPTOS DE ENOC Y ELÍAS

ENOC:

Génesis 5:24 (LBLA)

“Y Enoc anduvo con Dios, y desapareció porque Dios se lo llevó”

Hebreos 11:5 (LBLA)

“Por la fe Enoc fue trasladado al cielo para que no viera muerte; y no fue hallado porque Dios lo trasladó; porque antes de ser trasladado recibió testimonio de haber agradado a Dios”

ELÍAS:

2 Reyes 2:11 (LBLA)

“Y aconteció que mientras ellos iban andando y hablando, he aquí, apareció un carro de fuego y caballos de fuego que separó a los dos. Y Elías subió al cielo en un torbellino”

Como podemos ver, aunque es común que todos los seres humanos mueran físicamente, en el caso de Enoc y Elías, ellos nunca vieron la muerte, de la misma forma sucederá con todos los que estemos con vida en el momento del Rapto de la Iglesia, y obviamente al decir que es de la Iglesia, me estoy refiriendo a que solamente serán arrebatados aquellos que han recibido a Jesucristo como Señor y Salvador.

Vemos claramente que el Rapto de Enoc y Elías, estando vivos, son precedentes evidentes del Rapto que está a punto de suceder y que el Apóstol Pablo nos da algunos detalles:

1 Tesalonicenses 4:13-18 (LBLA)

“Pero no queremos, hermanos, que ignoréis acerca de los que duermen, para que no os entristezcáis como lo hacen los demás que no tienen esperanza. Porque si creemos que Jesús murió y resucitó, así también Dios traerá con Él a los que durmieron en Jesús. Por lo cual os decimos esto por la palabra del Señor: que nosotros los que estemos vivos y que permanezcamos hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron. Pues el Señor mismo descenderá del cielo con voz de mando, con voz de arcángel y con la trompeta de Dios, y los muertos en Cristo se levantarán primero. Entonces nosotros, los que estemos vivos y que permanezcamos, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes al encuentro del Señor en el aire, y así estaremos con el Señor siempre. Por tanto, confortaos unos a otros con estas palabras”

Respecto al tema del Rapto de la Iglesia, también se han levantado varias teorías sobre cuándo sucederá, no en cuanto a fechas exactas, sino en cuanto al orden de los eventos próximos. De esto seguiremos hablando en la siguiente Parte.

Los espero. Es un interesante camino el que tenemos por delante. ¿Listos para aprender?