Cristo pagó totalmente tanto por la sanidad de nuestro cuerpo como por el perdón de nuestros pecados.

A muchas personas se les dificulta creer que Dios quiere que estén sanas. Es posible que esas mismas personas estén sufriendo o viendo sufrir por la enfermedad y el dolor a un ser querido. En cualquiera de los dos casos, estas personas se desilusionan cuando sus oraciones aparentemente quedan sin respuesta. Como resultado ellos concluyen que seguramente Dios está permitiendo que esto suceda, o lo que es peor, que Él lo causó. Ambas interpretaciones están equivocadas y ponen en duda la bondad de Dios.

En este libro, Andrew habla de lo que el amor incondicional de Dios y la gracia verdaderamente ya han proporcionado. La sanidad es una porción grande de esa provisión. Él da la respuesta a muchas preguntas frecuentes, como las relacionadas con la expresión “un aguijón en la carne” referida a Pablo, la soberanía de Dios y muchas más. Si tú, o alguien que tú conoces, necesitan recibir sanidad, este libro es para ustedes.