PROVERBIOS 13:11 (NTV)
“La riqueza lograda de la noche a la mañana pronto desaparece; pero la que es fruto del arduo trabajo aumenta con el tiempo”
Muchas personas han tenido la oportunidad de escucharme decir desde el púlpito que Dios me dio la oportunidad de pasar de ser un empleado, con poco dinero en mi billetera y cuenta bancaria, a ser socio de varias compañías de E.E.U.U., con la capacidad financiera de sembrar mayores sumas de dinero para la extensión del Evangelio.
Hoy en día, doy seminarios de administración de finanzas, y me doy cuenta de que muchos de los asistentes vienen con unas locas expectativas, pues piensan que lo que les voy a compartir en el seminario es algo así como una receta de un jugo que se van a tomar en la noche, y que al otro día, “tarán”, ya serán dueños o socios de compañías exitosas.
Lo que muchas personas no saben, es que algo sumamente importante sucedió en medio de esa transición hacia la promoción financiera, y puedo sintetizarlo en dos palabras: Trabajo diligente.
En Mateo 25:14-30 encontramos un claro ejemplo de cómo opera el proceso de elección hacia la promoción. Jesús nos presenta en la parábola de los talentos a tres tipos de empleados a los cuales su jefe les entregó asignaciones conforme a sus capacidades, es decir, que ninguno podía decir que tenía una carga más allá de sus fuerzas. Lo que sucedió es que sólo dos de ellos fueron diligentes y se esforzaron por tener grandes resultados a la hora de que su jefe los llamara a dar cuentas, pero uno de ellos tenía a su jefe en tan mal concepto, que decidió ser perezoso y esperar a que su jefe llegara para presentar excusas.
Si lees todo el pasaje, te darás cuenta cómo los dos primeros hombres no sólo recibieron elogios por su buen trabajo, sino que además fueron promovidos y, por supuesto, el trabajador perezoso fue destituido de su cargo.
Te preguntarás: “Pero Pastor, ¿no se supone que la Gracia lo hace todo por mí y yo sólo tengo que recibir de Dios todo por fe?”. A lo cual te contesto: “¿Quién dijo que la fe es perezosa? Si mi fe es perezosa, es una fe muerta (Santiago 2:17). Así que cuando era un empleado común y corriente, sin ninguna autoridad dentro de la compañía, puse mi fe en la Gracia de Dios, en que Él me había equipado con cada don que necesitaba para el trabajo que hacía, me puse a trabajar diligentemente, me esforcé siguiendo cada principio que me daba la Palabra, para que Dios me hallara fiel y usara a mi jefe para ser promocionado. Y porque Dios es fiel y recompensa al trabajador diligente, un día, en una sala de socios fui recibido como uno de ellos.
Yo no he dejado de trabajar diligentemente; a pesar de que no me dedico a tiempo completo a los negocios, ahora trabajo a tiempo completo en el Ministerio, y sigo operando con la misma fórmula de esforzarme diligentemente por hacer un buen trabajo, porque tengo la seguridad de que Dios seguirá promocionándome, pues el desea que yo sea prosperado en todas las áreas.
Y lo mismo desea para ti. Dios desea promocionarte a niveles que nunca has imaginado, pero tienes que cooperar con Él. No menosprecies el lugar donde laboras ahora, porque si te esfuerzas en ser diligente, te aseguro que la promoción tocará a tu puerta.
COLOSENSES 3:23-24 (NTV)
“Trabajen de buena gana en todo lo que hagan, como si fuera para el Señor y no para la gente. Recuerden que el Señor los recompensará con una herencia y que el Amo a quien sirven es Cristo”
Gracias!!!! por compartir su gran conocimiento de la palabra con los que tanto necesitamos de la gracias de DIOS.
Amén gloria a Dios gracias 🙏
Muchas gracias pastor por cada palabra que nos ayuda a crecer como siervos de Cristo. Bendiciones
Pastor Lemes Gracias por su consejo. Sabes yo estoy desde que le escuche hablar de La Liberacion de las deudas yo vengo trabajando duramente para quitarme esa atadura de mi vida. Le pido a Dios que me regale salud, gozo, enthusiasm motivacion para levantarme todos los dias e ir a mi trabajo Con Alegria. Un Millon de Gracias por esos instrucciones tan valiosa para mi vida. Dios continue Bendiciendo Grandemente su Ministerio conjuntamente con su Familia!
Amén, Aleluya, Gracias pastor por tan Grande Bendición de poder enseñar de esta forma y ser de Bendición para muchos. Que Dios esté con Ustedes. Bendiciones
Gracias Pastor, bendiciones