Iglesia Palabra Pura
  • 10 noviembre, 2023
  • Rafael Lemes
  • 5

“La Biblia es un libro muy antiguo que debe actualizarse a nuestros tiempos, “Ya la ciencia demostró…”, “¿Cómo confiar en un libro que no entiende nuestros tiempos?”, Este tipo de frases vienen aumentando en estos tiempos, tratando de hacer ver como que es la Palabra de Dios la que debe adaptarse y actualizarse a los “nuevos tiempos y costumbres”. Analicemos:

HECHOS 7:22 (TLA) “Moisés recibió la mejor educación que se daba a los jóvenes egipcios, y llegó a ser un hombre muy importante por lo que decía y hacía”

Moisés fue escogido por Dios para ser quien liberara al Pueblo de Israel, de la esclavitud en Egipto hacia la Tierra Prometida. El haber sido acogido por la hija del Faraón le había dado acceso directo a la más destacada educación a la que sólo podían acceder los Egipcios de alta estima para la nación.

En la época de Moisés, se popularizó en Egipto el Papiro Ebers, un libro de medicina que era consultado como una autoridad para curar o prevenir cualquier tipo de enfermedades. Es altamente probable que Moisés, en el plan de estudios que recibió de sus maestros Egipcios, conociera a profundidad este papiro y haya seguido muchas de sus instrucciones. Para los Egipcios el Papiro Ebers era su máxima autoridad y fuente de sabiduría, si tenían alguna afección ellos acudían a sus consejos sin cuestionar.

HECHOS 7:23 (RVR) “Cuando hubo cumplido la edad de cuarenta años, le vino al corazón el visitar a sus hermanos, los hijos de Israel. Y al ver a uno que era maltratado, lo defendió, e hiriendo al egipcio, vengó al oprimido. Pero él pensaba que sus hermanos comprendían que Dios les daría libertad por mano suya; mas ellos no lo habían entendido así”

Aunque Moisés sabía que Dios tenía un propósito para él, no usó inicialmente Su sabiduría para que este se cumpliera, sino la sabiduría de Egipto, la del mundo, que le terminó costando a él y a Israel 40 años más de cautividad, pues este fue el tiempo que duró como fugitivo en la tierra de Madian, luego de matar al Egipcio.

1 CORINTIOS 3:19 (LBLA) “Porque la sabiduría de este mundo es necedad ante Dios…”

Moisés descubrió en su acción apresurada que la sabiduría del mundo es la más digna de desconfianza. Sin embargo, Dios se le presentó en medio de una zarza para mostrarle Su sabiduría totalmente confiable a la que él debía seguir, por ende, desechar la de Egipto.

ÉXODO 3:4 (LBLA) “Cuando el Señor vio que él se acercaba para mirar, Dios lo llamó de en medio de la zarza, y dijo: ¡Moisés, Moisés! Y él respondió: Heme aquí”

Dios no sólo le mostró a Moisés Su superior sabiduría para ser libres, sino además para ser sanados y mantener en sanidad. Él tenía que desechar todas las recomendaciones de las enseñanzas Egipcias, como el Papiro Ebers, y guiarse sólo por la instrucción de Dios.

El Papiro Ebers tenía escrito recetas como que si a alguien se le había enterrado alguna astilla en la piel debía aplicarse gusanos y estiércol de asno. Lo cual en realidad no sanaba, sino que terminaba acelerando la muerte, porque el estiércol contiene bacterias de tétano que empeoran cualquier herida. Un Egipcio no se hubiese atrevido a cuestionar lo que ellos consideraban sabiduría médica, pero la verdad es que sus supuestos remedios, eran peores que las enfermedades.

Moisés tuvo que desechar esta sabiduría del mundo y escuchar sólo la sabiduría de Dios, aunque no la entendiera completamente, confió en que Dios es inmensamente Superior a cualquier voz de autoridad en la tierra.

Dentro de los consejos que Dios le dio a Moisés, en cuanto a la salud, para que instruyera a Israel, estaba que:

  1. Debían bañarse frecuentemente (Levítico 15:4-27).
  2. Si tocaban un cuerpo muerto, debían hacerse un lavado profundo (Números 19:16).
  3. Si alguien tenía lepra o sospecha de una enfermedad infecciosa, debía aislarse de las demás personas por prevención de propagación (Levítico 13:46).
  4. Si alguien debía hacer sus necesidades fisiológicas, debía hacerlo fuera del campamento y tapar el excremento (Éxodo 23:13).

Moisés no tenía instrumentos médicos que hoy pueden detectar bacterias y virus, pero confió en que cada instrucción tenía el propósito de mantenerlos en bienestar, por lo tanto, desechó sus conocimientos de Papiro Ebers y sólo aplicó el consejo de Dios.

Lo cierto es que Dios ha dado Su Palabra para que conozcamos la verdadera sabiduría y caminemos en ella recibiendo Su bienestar, pero la mayoría de personas han preferido la sabiduría del mundo para terminar dándose cuenta de que Dios siempre tiene la razón.

Por ejemplo, sólo hasta 1847 se instituyó el lavado de manos obligatorio por parte de los médicos luego de tocar un cadáver; antes, los médicos acostumbraban a trabajar en autopsias y luego, sin lavar sus manos, salir a hacer exámenes a los pacientes, incluyendo los vaginales a las mujeres embarazadas.

O si el mundo hubiera prestado atención a las tradiciones higiénicas que seguían los Judíos respecto a los baños, lavados y aislamientos, se habría evitado la muerte de alrededor 200 millones de personas que murieron en la pandemia de la peste negra, que se propagó por sus prácticas de desaseo.

Todas las personas se evitarían tanto sufrimiento, muerte y dolor, si abandonaran por completo la sabiduría del mundo, y se aferraran a la sabiduría de Dios. La verdad es que todo lo que los científicos dicen revelar, Dios ya lo había afirmado antes.

– Dios fue el primero que afirmó que la tierra es redonda, cuando la humanidad por siglos creyó que era un disco plano (Job 26:7/Isaías 40:22).

-Dios fue el primero que afirmó que la vida está en la sangre, cuando durante muchos años las personas acudían a los barberos para ser “sanados” por medio de desangramientos (Levítico 17:11).

-Dios fue el primero que afirmó que la tierra tiene movimiento, antes de que se conociera por la comunidad científica (Lucas 17:34-36).

-Dios fue el primero que dijo que la luz se puede dividir, antes de que Isaac Newton lo descubriera (Job 38:24).

Entonces, les pregunto: ¿Es la Biblia la que tiene que actualizarse y aprender de los adelantos científicos? ¿O es toda la humanidad la que tiene que rechazar la sabiduría del mundo y actualizarse a la verdad de la Palabra para salvar su vida?

Moisés aprendió que los propósitos se cumplen si sólo se sigue la sabiduría de Dios. Aunque ustedes ya han recibido a Jesucristo como Señor y Salvador y, por lo tanto, ya tienen asegurada su salvación eterna, en esta tierra sólo cumplirán su propósito y vivirán en bienestar y salud si siguen la sabiduría de Dios y rechazan la del mundo. No significa esta declaración que no pueden acudir a ningún médico y seguir una receta médica, se trata de a quién respetan y siguen como máxima autoridad. Nunca se puede poner el concepto del mundo como infalible, lo cual sí se puede hacer con la Palabra de Dios.

5 comments on “LA SABIDURÍA DEL MUNDO VS LA SABIDURÍA DE DIOS

  1. Gracias amado pastor Rafael ,gracias por esta enseñanza, la sabiduría de Dios es única y verdadera .
    Proverbios 19:3
    La insensatez del hombre tuerce su camino,
    Y luego contra Jehová se irrita su corazón.
    Gracias
    Bendiciones

  2. pastor que articulo mas genial.en verdad las escrituras es el mejor libro de texto en el que debemos invertir nuestro tiempo pues es donde esta la plena instruccion para nuestro buen vivir.sea bendecido pastor rafael en abundante prosperidad en todos los aspectos de su vida

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