En Iglesia Palabra Pura creemos firmemente, por el estudio de las Escrituras, que Dios a lo largo de la historia se ha relacionado con la humanidad de diferentes formas, por periodos de tiempo determinados, o como le llamamos comúnmente: por dispensaciones.

La palabra dispensación viene del Griego Oikonomia que significa “sistema de orden”, palabra también utilizada para referirse a la labor que realiza un administrador, y un administrador es alguien que es responsable de compartir sus objetivos con otras personas que están bajo su autoridad, para que estas cumplan sus directrices, y de esta forma el administrador pueda tener éxito en el cumplimiento de sus objetivos. En caso de que el administrador considere que algo no está funcionando, puede cambiar sus políticas y condiciones, con el fin de tener éxito en su visión. Por ende, podemos ver que esta palabra Oikonomia (Dispensación o Administración) se puede aplicar en todos los niveles y esferas de la sociedad, ya que seguramente en algún momento han escuchado que al referirse a alguna empresa con cierto prestigio se menciona esta frase: “Hay nueva administración”, dando a entender que, a pesar de que es una empresa que ya está establecida, no seguirá operando bajo los mismos términos, porque han sido cambiados para mejorar.

Ahora, teniendo definida esta palabra, veamos a través de las Escrituras cómo la aplica Dios:

COLOSENSES 1:25-26 (NBLA) “De esta iglesia fui hecho ministro conforme a la administración (Oikonomia) de Dios que me fue dada para beneficio de ustedes, a fin de llevar a cabo la predicación de la palabra de Dios, es decir, el misterio que ha estado oculto desde los siglos y generaciones, pero que ahora ha sido manifestado a sus santos” (La adición en Griego es mía).

El Apóstol Pablo utilizó en esta Carta a los Colosenses la misma palabra que hemos definido “Oikonomia”. Él se llamó a sí mismo ministro, es decir, servidor, de la Administración, o Dispensación, es decir, de la Oikonomia de Dios. Ahora, noten algo muy importante: él no dijo que era servidor de Dios en Su administración general, sino en la administración (o Dispensación) que le fue dada, por lo que podemos ver que no ha existido una sola Administración de Dios; es más, vamos a ver que en las mismas Escrituras se revelan 7 Administraciones o Dispensaciones.

MALAQUÍAS 3:6 (RVR) “Porque yo Jehová no cambio; por esto, hijos de Jacob, no habéis sido consumidos”

Algunos podrían preguntarse: Pero si la Palabra de Dios dice que Dios no cambia, ¿por qué Dios cambiaría Su administración o Dispensación? Bueno, porque aunque es cierto que Dios no cambia, está lidiando con seres humanos, y el ser humano sí cambia.

En realidad, Dios nunca ha cambiado. Él en su esencia ha permanecido Justo, Santo, Perfecto, Misericordioso, Bondadoso y Fiel, Él es inconmovible. Pero el ser humano a lo largo de la historia sí ha cambiado, por lo que Dios ha tenido que relacionarse con el ser humano de una forma diferente para poder manifestarle Su bondad y Amor. Dios ha tenido que establecer periodos de tiempos, con un inicio y final, para relacionarse con el hombre y poder protegerlo del sistema de este mundo liderado por Satanás.

Veamos ahora otros versículos que nos sustentan el cambio de Dispensaciones:

HEBREOS 1:1-2 (RVR) “Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por los profetas, en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo”

No podemos dejar pasar por alto 3 puntos principales de estos dos versículos:

1. Habiendo hablado muchas veces: este punto no se puede sólo interpretar como que Dios ha hablado más de dos veces, sino que su objetivo es mostrarnos que Dios le ha hablado a varias personas a lo largo de la historia de la humanidad. Sin embargo, no lo hizo de la misma manera con todas esas personas. Por eso veamos el punto 2.

• De muchas maneras: aquí vemos que Dios, una y otra vez, ha cambiado la forma de relacionarse con el hombre. Es decir, ha tenido diferentes Administraciones o Dispensaciones, unas muy diferentes a las otras. Y noten que no dice “de algunas maneras”, sino “de muchas maneras”, ya que en realidad en la Palabra vamos a encontrar  que no son una ni dos, sino 7 Dispensaciones.

• En estos postreros días nos ha hablado por el Hijo: el Apóstol Pablo, quien considero es el escritor de Hebreos, por supuesto inspirado por el Espíritu Santo, nos dejó claro que nosotros también estamos en una Dispensación, y que Dios ahora se está comunicando con nosotros de una forma muy diferente a como lo hizo con nuestros antepasados, incluso, otras versiones añaden a la traducción del versículo 2 (de Hebreos 1) la palabra “ahora”, para hacer énfasis en el cambio de tiempo y forma de relacionarse Dios con nosotros.

Si no lo sabían, uno de los motivos por los que se escribió la Carta a los Hebreos, fue para que los Judíos cristianos entendieran que no debían tratar de relacionarse con Dios como si no hubiese ocurrido un cambio de Dispensación, pues muchos Judíos cristianos querían regresar al mismo sistema de obras bajo la Ley, pero sí lo hacían no estarían agradando a Dios, porque AHORA Él se relaciona con nosotros a través de Su Hijo, Jesucristo.

Diferenciar las Dispensaciones de Dios, nos ayudará a entender Sus movimientos, instrucciones, Pactos y Juicios. Y de la misma forma, nos ayudará a poder comprender cómo tomar la Gracia que se nos ha dado bajo esta Dispensación en la que ahora estamos. Dios no ha escondido las Dispensaciones, Él las ha revelado en las Escrituras, pero es nuestra responsabilidad, no de Dios, estudiar con diligencia las Escrituras para dividirlas. Tal y como se lo dijo el Apóstol Pablo a su hijo en la fe, Timoteo:

2 TIMOTEO 2:15 (RVR) “Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que traza bien (divide bien) la palabra de verdad”

Así que la próxima semana seguiremos viendo más sobre este importante e interesante tema de una manera práctica y sencilla.