En el Artículo anterior, vimos los siguientes puntos acerca del don de continencia y las características de las personas que lo poseen:

1. NO ES PARA TODOS, ES UN TIPO DE DON DENTRO DE VARIOS DONES.

2. EL DON PUEDE MANIFESTARSE TANTO EN PERSONAS SOLTERAS COMO EN PERSONAS VIUDAS.

• AQUEL QUE POSEE EL DON NO TIENE UNA CARGA INTENSA A NIVEL SEXUAL.
• NO SIENTE ILUSIÓN O ANSIEDAD RESPECTO AL MATRIMONIO.

Cada punto lo basamos en las declaraciones que dio el Apóstol Pablo en la Primera Carta a los Corintios, respondiendo a sus dudas frente a la soltería y el matrimonio. Así que sigamos viendo más puntos al respecto:

• EL QUE POSEE EL DON DE CONTINENCIA QUIERE DEDICAR SU VIDA EXCLUSIVAMENTE AL SERVICIO DE DIOS:

1 CORINTIOS 7:34 (RVR) “Hay asimismo diferencia entre la casada y la doncella. La doncella tiene cuidado de las cosas del Señor, para ser santa así en cuerpo como en espíritu; pero la casada tiene cuidado de las cosas del mundo, de cómo agradar a su marido”

Esto no significa que aquel que no posea el don no puede servir al Señor. Sin embargo, aquellos que no poseemos el don de continencia tendremos que lidiar con las responsabilidades que conlleva el matrimonio, con sus partes altas y bajas, y al mismo tiempo alternaremos nuestro tiempo y esfuerzo con nuestro llamado dentro del Cuerpo de Cristo, que por supuesto no es reemplazado por el matrimonio. Pero aquel que tiene el don de continencia sólo tiene en su mente la responsabilidad del servicio a Dios, lo cual le trae gran satisfacción. Es precisamente uno de los beneficios que más destacaba el Apóstol Pablo para animar a aquellos que poseían el don para que no se sintieran forzados a casarse. Ya que el Apóstol Pablo quería aprovechar al máximo su paso por la tierra pensando en las recompensas que le traería su trabajo para Dios. Sólo imagínense lo difícil que hubiese sido para el Apóstol hacer cada viaje Misionero trasladándose con esposa e hijos y enfrentándose a los peligros a los que se tuvo que enfrentar con la responsabilidad de una familia, hubiese sido mucho más complicado para él de lo que fue.

• AQUEL QUE POSEE EL DON DE CONTINENCIA Y ACEPTA CON GUSTO EL CELIBATO SIENTE PAZ EN SU DECISIÓN:

1 CORINTIOS 7:35 (RVR) “Esto lo digo para vuestro provecho; no para tenderos lazo, sino para lo honesto y decente, y para que sin impedimento os acerquéis al Señor”

1 CORINTIOS 7:35 (NTV) “Les digo esto para su propio beneficio, no para imponerles restricciones. Mi deseo es que hagan todo lo que les ayude a servir mejor al Señor, con la menor cantidad de distracciones posibles”

1 CORINTIOS 7:35 (PDT) “Les digo esto para ayudarlos, no para ponerles limitaciones. Lo que quiero es que vivan en el buen camino, que se entreguen completamente al Señor, sin distracciones”

Les puse 3 versiones de 1 Corintios 7:35 para extraer mucho más el significado de las palabras del Apóstol Pablo, ya que este punto es supremamente importante. La motivación del Apóstol era que ninguno de los Corintios se viera luchando con su conciencia ni mucho menos violándola respecto a qué decisión tomar frente al matrimonio. La invitación del Apóstol era a que hicieran todo aquello que les ayudara a servir mucho mejor al Señor de acuerdo a sus dones y llamados. Y encuentro que este punto es incluso el más importante de los que hemos visto, ya que sobre el Siglo ll se notaba cómo la falsa enseñanza de la ideología gnóstica sobre repeler cualquier placer para no pecar estaba permeando las mentes de muchos cristianos débiles en la doctrina, logrando que en el Siglo lV las autoridades de la Iglesia le prohibieran casarse a todo aquel que sintiera un llamado al Ministerio a tiempo completo.

Esta decisión fue catastrófica y anti-Bíblica, desconociendo que este jamás fue un requisito dado por Jesucristo, como cabeza de la Iglesia, a través de Sus Apóstoles. Incluso, el Apóstol Pablo les recordó a sus dos hijos en la fe los requisitos que debían cumplir aquellos que aceptaban el llamado al Ministerio, para ser considerados para una separación por imposición de manos:

1 TIMOTEO 3:2 (LBLA) “Un obispo debe ser, pues, irreprochable, marido de una sola mujer, sobrio, prudente, de conducta decorosa, hospitalario, apto para enseñar”

TITO 1:6 (NTV) “El anciano debe llevar una vida intachable. Tiene que serle fiel a su esposa, y sus hijos deben ser creyentes que no tengan una reputación de ser desenfrenados ni rebeldes”

Lamentablemente, a partir del Siglo IV, al contrario de indagar las Escrituras y basarse exclusivamente en ellas, ocurrió lo siguiente:

AÑO 306 d.C: se decretó que ningún sacerdote podía dormir con su esposa el día anterior a oficiar un Servicio.

AÑO 325 d.C:  se decretó en el Concilio de Nicea que ningún hombre que fuera ordenado como sacerdote podía casarse.

AÑO 385 d.C: se decretó que todos los sacerdotes que tuvieran esposa ya no podían dormir jamás con ella.

AÑO 590 d.C: se recomendó que todos los sacerdotes que tuvieran esposa se divorciaran de ella como acto de purificación.

A partir de la Reforma Protestante, de Martín Lutero, se trajo claridad sobre el matrimonio y el sexo en el matrimonio para todo aquel que se pone al servicio a Dios, sin embargo, evidentemente esta mala interpretación de la Palabra sigue siendo practicada por la Iglesia Católica, y como ya lo saben, los Católicos no son nuestros enemigos, pero ciertamente están equivocados al respecto.

Toda esta falsa enseñanza es basada en una incorrecta interpretación del propósito del sexo. Pero el sexo dentro del matrimonio es algo que Dios aprueba y bendice, y ningún creyente debe sentir vergüenza de disfrutar del sexo con su cónyuge, creyendo que se ha contaminado o por lo mismo ha perdido su devoción a Dios. Y esto era lo que precisamente el Apóstol quería evitar en los Corintios, que permanecieran solteros sin poseer el don de continencia, o que se casaran pensando que habían defraudado a Dios al hacerlo.

Conclusión: No todos poseen el don de continencia, pero aquel que lo posee no debe sentirse presionado hacia el matrimonio. Así mismo aquel que mientras está soltero siente tensión a nivel sexual y deseo de casarse, no debe forzarse a vivir una vida célibe, sino seguir ejercitando su dominio propio hasta que sea el momento de dar el paso al matrimonio. Además, el hecho de que una persona posea el don de continencia y tenga control a nivel sexual, no significa que esa persona es perfecta en la totalidad de sus acciones. Esa persona tendrá que ser corregida, edificada y consolada por la Palabra de la misma manera que nosotros, sólo que sin vivir en matrimonio.