Iglesia Palabra Pura

¿Es posible que te sientas identificado con esta escena? Cada fin de año muchas personas hacen un análisis de los muchos propósitos y metas que se trazaron, pero nunca cumplieron, así que a la expectativa del 31 de Diciembre, faltando 10 segundos para las 12 de la noche, inicia la cuenta regresiva: “¡10, 9…3, 2, 1! ¡Feliz Año!”; y luego de unos efusivos abrazos, besos y unas sentidas palabras llegan las famosas frases: “Este año sí voy a terminar…, este año sí voy a presentarme a…, este año sí me voy a poner las pilas para…”. Sin embargo, es evidente que en los primeros días las personas se empiezan a esforzar para cumplir todas esas metas y propósitos, pero al transcurrir los pocos días, desisten y tiran la toalla, dejando todo para otro conteo regresivo de 31 de Diciembre.

Si te has sentido identificado, te hago otra pregunta: “¿Quieres seguir en ese mismo círculo vicioso o de una vez por todas quieres ver resultados positivos? Me imagino que tu respuesta fue: “Quiero ver resultados positivos”. Así que hoy quiero darte un consejo con una frase que al principio te parecerá absurda, pero que espero que en la medida que te la explique tenga más sentido para ti: “Lo que debes hacer este año es arrancar los Matapalos de tu jardín”.

Déjame explicártelo: en las partes tropicales de nuestro continente americano, crece un árbol con grandes raíces que se extienden como garras llamado el Matapalo; los jardineros saben que este árbol se puede convertir en el terror de un jardín, ya que en la medida en que va creciendo, empieza a succionar la savia de los otros árboles introduciéndoles toxinas poco a poco. El Matapalo es todo un reto para los jardinero, ya que tiende a mimetizarse de tal forma que parece el follaje de otro árbol, y si no se descubre y se cortan sus ramas, este llega un momento en que estrangula los árboles buenos, los termina de secar y los deja muertos.

Utilizo esta ilustración para que comprendas por qué cada vez que empiezas un proyecto no lo llevas a buen término. Los Matapalos son como los malos hábitos, ellos parecen pequeños, simplemente inofensivos, comunes, normales, pero poco a poco van ahogando tus proyectos y sueños. Lo que sucede es que a los malos hábitos se los ha dejado como un problema menor, pero son ellos los que finalmente pueden convertirse en tus peores enemigos.

Los Matapalos (los malos hábitos) se van mimetizando detrás de una excusa, y en la medida en que los excuses, ellos te van succionando hasta que matan tus proyectos o sueños. Por ejemplo, uno de tus propósitos para este año puede ser el de vivir libre de deudas; sin embargo, tienes el mal hábito de pasar por los almacenes, y cuando te gusta algo, decir: “Y sólo por preguntar, ¿manejan sistema de créditos?”. O por ejemplo, tienes la meta de este año estudiar más la Palabra de Dios y pasar más tiempo de intimidad con Él, pero tienes el mal hábito de mirar tus redes sociales justo antes de Orar, sólo para sentir que no te estás perdiendo de nada importante, pero lo que sucede es que pasa una hora, y otra hora, y todavía sigues siendo presa de las distracciones.

No te estoy condenando; por el contrario, te estoy mostrando un punto que quizás no viste antes, que quizás si repetías constantemente: “Es que yo tengo el mal hábito de…”, sea el momento de arrancarlo de raíz de tu vida y decir: “Yo no tengo por qué tener esto, esto está mal, esto me está desenfocando de mi meta”.

En la Palabra de Dios, el Cantar de los Cantares 2:15 (RVR) dice: “Cazadnos las zorras, las zorras pequeñas, que echan a perder las viñas; porque nuestras viñas están en cierne”. Las zorras grandes suelen meterse a los viñedos a comerse los frutos, pero son las zorras más pequeñas las que más daño le hacen al viñedo, ya que su pequeño tamaño las hace fácilmente imperceptibles, y lo que sucede es que al tratar de comerse el fruto, al no alcanzarlo, se estiran de tal forma que rompen la rama y provocan grandes pérdidas, por lo que no queda más remedio que resembrar. Así son los malos hábitos: a los ojos pequeños, pero altamente dañinos.

Te invito para que te tomes un tiempo de reflexión con el Señor, me gustaría que le pidieras que te muestre cuáles son esos malos hábitos que necesitan ajustes urgentes. Estoy convencido de que no sólo te mostrará las áreas en las que debes trabajar, sino que además te dará las estrategias para exterminar esa plaga de sueños de una vez por todas. Siempre digo: “Los detalles nos pueden sumar o restar, nos pueden elevar o destruir”. Así que los malos hábitos no son detalles menores, estos malos hábitos que has excusado tanto tiempo sin darte cuenta, son los que hoy pueden estar afectando tus proyectos. ¿Así que ahora ves que tiene más sentido la frase: “Lo que debes hacer este año es arrancar los Matapalos de tu jardín”?

3 comments on “DESARRAIGA LOS MATAPALOS

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