Esta ha sido una magnífica Serie donde hemos estudiado acerca de las Dispensaciones o Administraciones que encontramos en la Palabra. Hasta este Artículo hemos visto 4 Dispensaciones:
- LA INOCENCIA.
- LA CONCIENCIA.
- EL GOBIERNO HUMANO.
- LA PROMESA.
Hoy avanzaremos con la quinta Dispensación/Administración:
LA DISPENSACIÓN DE LA LEY DE MOISÉS
Como primer dato interesante, deben saber que esta Dispensación cierra el grupo de cinco Dispensaciones pertenecientes al Antiguo Testamento. Tanto la dispensación de la Inocencia, la Conciencia, el Gobierno Humano y la Promesa, como la Ley de Moisés, hacen parte del Antiguo Testamento, y es por el mismo motivo que debemos prestar mucha más atención en por qué se dio esta transición.
La Dispensación de la Ley tuvo su inicio luego de que el Pueblo de Israel, por intervención Divina, saliera del yugo opresor de Egipto, y se encontrara acampando en el Monte Sinaí, esperando instrucciones de su líder Moisés respecto a cómo avanzar hacia la Tierra Prometida.
Moisés recibió este mensaje de parte de Dios para Su Pueblo:
“Vosotros visteis lo que hice a los egipcios, y cómo os tomé sobre alas de águilas, y os he traído a mí. Ahora, pues, si diereis oído a mi voz, y guardareis mi pacto, vosotros seréis mi especial tesoro sobre todos los pueblos; porque mía es toda la tierra. Y vosotros me seréis un reino de sacerdotes, y gente santa. Estas son las palabras que dirás a los hijos de Israel” (Éxodo 19:4-6, RVR).
Las Palabras de Dios hacia Israel eran una muestra de Su Bondad y Fidelidad. Él les estaba, en otras palabras, prometiendo que si avanzaban confiando en Él, como lo hizo el Patriarca Abraham, recibirían Su favor porque habían hallado Gracia ante Sus ojos para seguir siendo Su nación Santa escogida.
La respuesta del Pueblo de Israel, tenía que haber sido llena de agradecimiento a la Bondad de Dios, reconociendo que ellos no tenían ningún mérito para tan grandes Beneficios, manifestándole a Dios: “Sí, queremos seguirte y confiar en ti como nuestro Patriarca Abraham, pero Dios, en nuestras fuerzas no podremos lograrlo, ayúdanos a seguirte, necesitamos tu ayuda para no ser necios a tu voz”.
Sin embargo, esta no fue su respuesta. Por el contrario, respondieron con orgullo:
“… Cumpliremos con todo lo que el Señor nos ha ordenado” (Éxodo 19:8).
Fue esa respuesta del Monte Sinaí la que cambió la forma en como Dios se siguió relacionando con Israel, ya que entró en vigencia la Dispensación de la Ley, con un Pacto de altas demandas, que mantenía la carga de la maldición o bendición sobre los hombros de los Israelitas, ya que todo dependía de su comportamiento a los mandatos. En el libro de Hebreos encontramos lo que significó para los Israelitas entrar bajo esta nueva Dispensación, que ellos por ignorancia y orgullo habían provocado:
HEBREOS 12:20-21 (RVR) “porque no podían soportar lo que se ordenaba: Si aun una bestia tocare el monte, será apedreada, o pasada con dardo; y tan terrible era lo que se veía, que Moisés dijo: Estoy espantado y temblando”
Ya que habían creído en sus propias fuerzas, Dios los confinó a la Ley con el propósito de callarles la boca de la proclamación de su propia justicia, y que así se rindieran a la única esperanza de salvación, la Simiente Prometida desde Génesis.
ROMANOS 3:19-20 (RVR) “Pero sabemos que todo lo que la ley dice, lo dice a los que están bajo la ley, para que toda boca se cierre y todo el mundo quede bajo el juicio de Dios; ya que por las obras de la ley ningún ser humano será justificado delante de él; porque por medio de la ley es el conocimiento del pecado”
Siempre me gusta aclarar que la Ley es Santa, Perfecta y Pura, pero es imposible que un ser humano, sin Cristo o en Cristo, la cumpla al pie de la Letra. Sólo Jesucristo cumplió toda la Ley. La misma Ley le demostraba al hombre su incapacidad de poder cumplirla en su totalidad, por ende, su incapacidad de justificarse por sus obras.
SANTIAGO 2:10 (RVR) “Porque cualquiera que guardare toda la ley, pero ofendiere en un punto, se hace culpable de todos”
Un hombre esforzándose mucho podría cumplir algunos puntos de la Ley, pero para ser considerado justo delante de Dios, no puede pasar por alto ningún punto, porque se hace responsable de quebrantarla. Y aunque quebrante la Ley por uno o varios pocos puntos, lo que importa es que la quebrantó, y por lo tanto, su justicia humana no sirve de nada delante del estándar perfecto de Dios.
GÁLATAS 3:23 (RVR) “Pero antes que viniese la fe, estábamos confinados bajo la ley, encerrados para aquella fe que iba a ser revelada”
Así que Dios confinó a Israel bajo el Pacto de La Ley de Moisés, en una Dispensación que lleva el mismo nombre, donde Dios se relacionó con Su Pueblo de acuerdo al cumplimiento del Pacto; si ellos atendían Su voz y obedecían, recibirían Su Bendición, pero si ignoraban Su instrucción y desobedecían, serían castigados con la maldición del Pacto de la Ley.
Este tiempo fue reconocido como un tiempo de Condenación y de muerte (2 Corintios 3:7,9); ya que ningún Israelita pudo cumplir la Ley, y por lo tanto, recibió una y otra vez el castigo por su desobediencia. Pero, de acuerdo al perfecto plan de Dios, el Cristo Eterno se encarnó en una joven Israelita llamada María, y en condición de ser humano, vivió perfectamente bajo la Dispensación de la Ley, cumpliendo el Pacto vigente:
MATEO 5:17 (RVR) “No penséis que he venido para abrogar la ley o los profetas; no he venido para abrogar, sino para cumplir”
Jesús cumplió cada punto de la Ley no sólo por Su naturaleza perfecta, sino además, para que aquellos que pusieran su confianza en Él fueran también declarados participantes de Su justicia y, por lo tanto, tuvieran un acceso directo a Dios sin las distancias que se habían creado bajo la Dispensación de la Ley.
Los espero en el próximo Artículo, para que sigamos viendo cómo terminó esta Dispensación, y con su finalización a qué Dispensación le dio paso.
Yo estoy muy agradecida con Dios por conocer de ustedes,atravez de las redes sociales, siempre he querido conocer de la palabra ,pero no había tenido la oportunidad de tener personas idóneas para poder e tender la palabra y conocerles para mi ha sido una gran vendicion
Maravillosa explicación muchas gracias Pastor, aprendiendo cada día más de su sabiduría 🙏🏻