Introducción
Terminando este mes de Febrero arrancamos con una Serie. La idea que tengo es que analicemos a la luz de la Palabra algunos conceptos que muchas personas han tomado como verdad, pero que en realidad todo ha sido producto de sacar versículos de contexto, y no siendo lo que realmente Dios nos quiere expresar en Su Palabra, han hecho mucho daño en las personas que los han creído.
El Apóstol Pablo le dio dentro de varios consejos a su hijo en la fe, Timoteo, dos consejos que considero importantísimos para nuestro caminar en Cristo. Veámoslos en 2 Timoteo 2:15 en la versión NVI :
“Esfuérzate por presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse y que interpreta rectamente la palabra de verdad”
El Apóstol Pablo le dijo a Timoteo, básicamente: “Timoteo, puedes llegar a ser considerado como no aprobado, si no te esfuerzas te vas a avergonzar, y mucha atención, Timoteo, porque la interpretación de la Palabra de Dios es determinante para que te presentes como obrero aprobado”.
Muchas personas que se ponen de acuerdo con el falso concepto de que todo es relativo, creen que la Palabra de Dios está sujeta a la interpretación privada de cada uno. Fácilmente alguien dice: “Esa es mi forma de ver la Biblia, para mí eso es lo que dice, y eso es lo que me importa”. Pero esto no es verdad, la misma Palabra nos dice en 2 Pedro 1:20 (LBLA):
“Pero ante todo sabed esto, que ninguna profecía de la Escritura es asunto de interpretación personal”
Así que ninguno de nosotros puede decir: “Yo pienso que esto es lo que Dios quiso decir…”. Es la misma Palabra la que explica la Palabra. En la sección que dice “que interpreta rectamente la palabra de verdad”, en otras versiones aparece como “que traza bien la palabra de verdad” (RVG), o también como “que divide correctamente la palabra de verdad” (KJV). Lo que nos permite ver que entonces sí hay una forma incorrecta de interpretar la Palabra, y que precisamente esta mala interpretación se debe a no saber dividirla, poniendo como corte importante la obra de Jesucristo en la cruz, el Nuevo Pacto del que hacemos parte aquellos que hemos sido justificados por la fe en Jesucristo.
No sé si recuerdan que muchas veces cuando Adriana y yo grabábamos los programas de Blaze Ministries International, y mencionábamos un versículo, normalmente les decíamos: “Vayan y busquen en sus Biblias este versículo” o “esa referencia la encuentran en…de la Palabra”. Nuestra invitación era a que cada uno fuera testigo de lo que realmente dice la Palabra, mas nunca buscábamos que cada uno dijera: “Pues ya leí el versículo, y para mí esto es lo que dice”. Absolutamente no.
Las tinieblas pueden soportar el hecho de que leas la Palabra, pero no el hecho de que la comprendas. Por eso aunque las tinieblas saben que han sido derrotadas por la obra redentora de Jesucristo, y que cuando tú recibiste a Jesucristo ellas perdieron todos los derechos que tenían sobre ti, aún siguen lanzándote dardos para que no interpretes correctamente la Palabra, no la uses bien, no disfrutes de la bendición, ni mucho menos puedas presentarte como obrero aprobado delante de Dios, para recibir tus recompensas.
El campo de batalla está en tu mente. La misma Palabra nos dice: “Porque cual es su pensamiento en su alma, tal es él…” (Proverbios 23:7 [RVR]). Si las tinieblas logran capturar lo que piensas y distorsionarlo, haciéndote creer que tú puedes crear la verdad, y no que ya existe una absoluta verdad, entonces estarán avanzando en sus planes perversos en tu contra, les estarás abriendo un pequeño espacio en la puerta de tu vida para incursionar en tu contra.
En ese campo de batalla tú no tienes por que estar indefenso ante el enemigo. Mira lo que dice 2 Corintios 10:4-5 (RVR):
“porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas, derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo”
Los pensamientos no son algo menor en nuestra vida, así como pensamos, así actuamos, y de la misma forma son nuestros resultados. Una fortaleza mental es un pensamiento arraigado en la vida de una persona, el cual está tan firme que no puede ser derribado fácilmente. Estos versículos nos permiten ver que aquello que se esconde en las fortalezas mentales son argumentos que se levantan contra el conocimiento de Dios. Es impresionante saber que hay muchos cristianos que hoy no saben que tienen pensamientos y conceptos que en realidad están en contra del conocimiento de Dios. Estos cristianos cuando son confrontados, han levantado una fortaleza tan grande, que sólo esta fortaleza puede ser derribada por una gran arma, y esta arma es la Palabra de Dios.
La Palabra de Dios no sólo es comparada con una lámpara que ilumina nuestro camino (Salmos 119:105), o con una espada que penetra hasta lo más profundo de nuestro ser (Hebreos 4:12), sino que también es comparada con un martillo. Jeremías 23:29 (LBLA) dice:
“¿No es mi palabra como fuego —declara el Señor— y como martillo que despedaza la roca?”
Hoy muchas personas creen que Jesucristo es el Señor, realmente se han arrepentido de llevar una vida de pecado, pero tienen fortalezas mentales como: “Dios me puso una enfermedad para hacerme más humilde”, “Dios no quiere que yo prospere, porque el dinero es la raíz de todos los males”, “Dios necesitaba un angelito más en el Cielo y se llevó a mi hijo”. Estos conceptos incorrectos van en contra del conocimiento de Dios, fueron levantados por no saber dividir correctamente la Palabra y creer que algunos versículos dicen algo cuando realmente no lo dicen, pero muchas personas no lo saben, y tienen esos conceptos incorrectos escondidos como unas fortalezas en sus mentes.
¿Ves la importancia de interpretar correctamente la Palabra? ¿Ves también la gran responsabilidad que recae sobre Adriana y sobre mí, como Pastores de Iglesia Palabra Pura? Por eso puede parecer dura nuestra Enseñanza, pero no es dura, es real, basada en la correcta división de la Palabra, y la Palabra cuando encuentra una fortaleza mental golpea como martillo para derribarla. Los espero en el próximo blog para que empecemos con la Serie ESTO NO ES LO QUE DICE.
Excelente Enseñanza. Pastor Gracias por no ser egoista con estas revelaciones del ESPIRITU SANTO.
Te deseo lo mejor y que nuestro PADRE CELESTIAL Guarde tú buen corazón.
En el nombre de Jesús de Nazaret. Amén.