La analogía perfecta para comparar al deseo sexual, es el fuego, ya que si se mantiene en un ambiente controlado, beneficia, de lo contrario, lastima o destruye; una cálida fogata podría formarse al poner límites al fuego, pero un incontrolable incendio haría muchísimo daño a su paso, si desde la primera chispa no se le establecen límites.
La pornografía busca precisamente derribar los límites del deseo sexual de cualquier ser humano para esclavizarlo, esta busca encender lo que en la Palabra de Dios se conoce como Lascivia.
EFESIOS 4:17-19 (RVR) “Esto, pues, digo y requiero en el Señor: que ya no andéis como los otros gentiles, que andan en la vanidad de su mente, teniendo el entendimiento entenebrecido, ajenos de la vida de Dios por la ignorancia que en ellos hay, por la dureza de su corazón; los cuales, después que perdieron toda sensibilidad, se entregaron a la lascivia para cometer con avidez toda clase de impureza”
La Lascivia aparece en la transliteración Griega como “Aselgeia”; esta palabra se utiliza principalmente para referirse a aquella persona que decide ignorar las señales de su conciencia y dar rienda suelta a sus deseos sexuales. El Apóstol Pablo advirtió que este comportamiento es coherente con el de los gentiles (no nacidos de nuevo), porque están sumergidos en la oscuridad del reino de las tinieblas, pero aquel que ha nacido de nuevo tiene la luz de la Palabra para comprender que, si bien el deseo sexual no es un pecado, no ponerle los límites que Dios estipuló, sí lo es.
Por supuesto que un verdadero nacido de nuevo no desea entregarse a la lascivia, pero la pornografía es lo suficientemente paciente para que poco a poco vayas violando tu conciencia, hasta que incluso justifiques “los supuestos beneficios” de esta pervertida práctica. No creerán la cantidad de cristianos casados que creen que ver pornografía es una herramienta necesaria para avivar el deseo sexual en el matrimonio, o la cantidad de cristianos solteros que afirman lo educativo que es consumir este contenido. Pero no es lo uno ni lo otro, los dos conceptos son mitos que hacen parte de este diabólico engaño, que hace muchísimo daño al ser humano en todas las áreas.
La pornografía no tiene ningún beneficio, por el contrario, se ha comprobado su impacto negativo a nivel físico:
- La eyaculación precoz.
- La impotencia sexual/disfunción eréctil.
- La eyaculación retardada.
- Disminución o pérdida del deseo sexual por el cónyuge.
Hace muchos años atrás, la impotencia sexual era generalmente relacionada con los hombres de la tercera edad, pero la verdad es que a medida que ha aumentado la disponibilidad de ver pornografía en tan sólo un click, ha incrementado la estadística de hombres jóvenes padeciendo impotencia sexual, los cuales están teniendo que incluso iniciar su vida matrimonial con la ayuda de medicamentos para tratar su impotencia. Esta impotencia también está relacionada con los efectos que tiene la pornografía a nivel mental:
Las personas que consumen pornografía cambian la percepción real de lo que es el sexo, por una postura totalmente ficticia. Por lo que a la hora de tener la oportunidad de disfrutar de una verdadera, pura y placentera relación sexual en el matrimonio, las fortalezas mentales que se han establecido en sus creencias respecto a la sexualidad, les generarán un bloqueo de tal forma que sientan que lo real es poco satisfactorio, o que incluso, el cónyuge es el problema de la pérdida del deseo sexual o impotencia sexual.
Generalmente el adicto a la pornografía no comprende que la impotencia e inapetencia sexual es producto precisamente de su adicción, por lo que cree que la solución es incrementar la dosis de material pornográfico, o compartir su hábito pecaminoso con su cónyuge, para supuestamente avivar la llama de la pasión. Este es un tema del que poco se denuncia, pero que realmente ha tocado a una gran parte de matrimonios cristianos, donde están mancillando su lecho al permitir que la pornografía haga parte de él.
HEBREOS 14:4 (DHH) “Que todos respeten el matrimonio y mantengan la pureza de sus relaciones matrimoniales; porque Dios juzgará a los que cometen inmoralidades sexuales y a los que cometen adulterio”
La justificación que tienen muchos matrimonios cristianos, es que la pornografía no está mal debido a que todo sucede es en la mente, y por lo tanto, nunca llegarán a la infidelidad real, lo cual es mentira, porque la misma palabra Pornografía lo revela, pues esta viene del Griego “Pornographos”, cuya división significa:
Porné: prostituta y adulterio.
Graphein: escritura o escribir.
La unión de “Porné” y “Graphein” deja claro que la pornografía es la forma de escribir el adulterio que se llevará a cabo. Es decir, que el adulterio inicia en la mente, como precisamente lo afirmó nuestro Señor Jesucristo:
MATEO 5:28 (PDT) “Pero ahora yo te digo que si alguno mira a una mujer con el deseo de tener relaciones sexuales con ella, en su mente ya ha cometido pecado con ella”
El daño a nivel mental de la pornografía lleva a que las personas crean que esta es sólo una forma de fantasear con sus más bajos instintos sin tener que llegar a los hechos, pero la verdad es que sus mentes se están corrompiendo hasta el punto de desensibilizarse totalmente de lo que realmente es puro y santo.
Ahora, también tengo que expresar que hay una gran parte de cristianos que saben que necesitan ser libres de la adicción a la pornografía, y que son conscientes del daño que han permitido que esta haga en sus vidas, pero que se sienten frustrados porque creen que nunca podrán librarse de las cadenas del pecado sexual, sobre todo en este tiempo donde no hay que esforzarse para buscar la pornografía en sitios clandestinos, sino que hay una disponibilidad abrumadora de este contenido públicamente, por lo que en el siguiente artículo veremos cuál es la salida que ofrece la Palabra respecto a esta esclavitud sexual. En Cristo siempre hay una salida, ninguna adicción puede prevalecer en aquel que pone su confianza en Cristo.
Gracias pastor excelente
Excelente
Muchas gracias pastor por estos artículos tan interesantes! Y es demasiado valioso para nosotros los jóvenes porque cada vez estamos más expuestos a este tipo de contenidos!
excelente articulo muy necesario en estos dias donde esa practica se ha vuelto tan accesible para todas las personas en especial para los jovenes
Gracias pastor por esta excelente enseñanza para nuestra edificación espiritual en Cristo Jesús
Amén…
Gracias por el texto, me sentí muy identificado. Que Dios nos ayude a salir de este hoyo profundo.
Excelente, muchas gracias y bendiciones
Gracias Pastor por sus enseñanzas
Dios lo Bendice con anta Sabiduría
Sabiduría que imparte con tanto amor a todos.
Gracias Pastor tremendo artículo que nos ayuda a tener más claridad sobre ese tema. Bendiciones